en mi clase de "escritoras colombianas del siglo XIX y XXI” hemos leído dos libros; uno de Josefa Acevedo, Proscrita en esta tierra y uno de Soledad Acosta, Una Holandesa en América.
el de Josefa Acosta es una colección de escritos; su autonecrología, unos cuadros de la vida privada de algunos granadinos y unas cartas con un gran amigo de ella. dentro de toda esta narrativa, porque hay que entender este conjunto de escritos como una misma narrativa, se ve intento de honestidad, como habla del silencio, como son escritos políticos total y completamente. como ella, siendo una mujer bogotana en el comienzo del 1800 se separa de su esposo, se vuelve profesora, se hace una voz, con la que condona mucho también, porque finalmente tiene necesidades y responsabilidades sociales y económicas que atender. con todo y esto, igual denuncia mucho sobre la militancia obligada, el rol de la mujer en esa sociedad, el elitismo, la falta de educación.
por el otro lado, el libro de Soledad Acosta, una narrativa en la que Lucía, una niña holandesa viaja a Colombia, totalmente distinto a lo que le habían pintado, también con una hacienda y una familia en necesidad de ayuda.
esta novela, mal vendida como una novela femenina, una novela romántica, es sobre todo una novela política (escrita por una mujer en el siglo XIX, osea tiene sus espacios grises). Pero es algo muy cierto lo que dice Doris Sommer en su ensayo; How romance can love us to death: pues la historia y la política son inextricables de la ficción en el proceso de construir naciones y las novelas históricas producidas en este proceso generan o refuerzan lo que llamamos un discurso de gendered politics, que es inevitablemente jerárquico y parece natural sino ideal.
y lo interesante es que cuando se hace una lectura crítica se ve que en una holandesa en américa no cumple con nada de eso. presenta a hombres super secundarios en la narrativa. un patriarca super ridículo que no cumple con nada de lo que debería cumplir. una relatación súper completa de la guerra, unas mujeres que estudian teología para decidir si quieren ser católicas o no, es una novela que se incluye en el romanticismo, realismo y naturalismo.
hemos sido revolucionarias y feministas siempre. sólo ahora nos estamos dando cuenta.
agosto 30, 2023
10:23 am
bogotá
Comments