un mes y medio no es tanto. en contexto, un mes y medio no es tanto. cuando estaba en el colegio, un mes y medio se me pasaba de una. ni me habría alcanzado a extrañar. de pronto se sintió como tanto porque metí todo lo que pude en ese tiempo, porque en 17 días estuve en 4 países y 13 aviones, porque viajar sola hace que todos los días sean un acontecimiento.
acá les voy a escribir una serie de pequeñas grandes cosas que hacían que cada día importara, valiera la pena, desde la llegada a madrid:
que C me recibiera con una semana de anticipación
el mesero que nos dió consejos de cuánto pedir cuando vio que nos queríamos pedir el menú completo
ver a mis amigos del colegio
C que me pintó las uñas
el uber que a las 6am tenía dembow y quería que cantara con él, que me puso vallenato cuando le dije que era colombiana
mi tío que cuando llegue a noruega me fue a recoger hasta yo no se donde porque en el tren me pasé dos estaciones.
la emoción de mis primas cuando les llegue de sorpresa
el amigo de mi mamá que le mandó una librería en noruega que creía que me gustaría (y claro que me gustó)
mi tía que me ayudó a buscar qué museos iban a estar abiertos y me hizo itinerario de a cuales tenía que ir y en qué orden
los museos noruegos tan divinamente hechos
la emoción de mi tía explicandome que pasabamos por un túnel que cruzaba la ciudad y en un punto bajaba muchos metros debajo del mar
la emoción de mis primas en el escape room (aunque hiciéramos todo mal, la pasamos tan bien)
los señores de la tienda de souvenirs que me ayudaron con la talla de medias de mi papá y me preguntaron por mi acento
mis tíos que me regalaron unas botas amarillas (por mi clara obsesión con el color)
mi tía que se quedó hasta las 4 am hablando conmigo de la vida.
S y R que fueron a recogerme a la estación del tren en florencia
la emoción con la que ambos hablaban del arte en el uffizi
su preocupación genuina por mis ampollas. no porque les iba a dañar su visita al museo, sino porque querían que yo estuviera bien.
la delicia de helado que S quería mostrarme
las gomitas del restaurante donde comimos
S que se quedó hasta tarde despierta buscando qué íbamos a hacer el fin de semana
la delicia de sandwich de salmón que nos comimos
discutir libros con R en el tren
la divinidad de la muralla de lucca
caminar por ahí y encontrarnos con iglesias
bailar con S enfrente de la iglesia
las velas con formas de animales (las de el elefante y el búho tocando violin)
todas las fotos tan lindas que R nos tomó
el señor que aplaudía y ponía a todos los pájaros a cantar
la delicia de comida que nos hizo R
la delicia de desayuno que nos hizo R
Arezzo y su feria de antigüedades
el marco de gafas que se encontró S
las fotos viejas que nos encontramos que dijimos que habíamos sido nosotras en otra vida
el mesero del café que nos picó el ojo y nos dió uno de los mejores cafés que nos tomamos allá
el lugar de pizza al que entramos por error y casi ni alcanzamos a entrar que terminó siendo la mejor pizza del paseo
a la trattoría que fuimos esa noche
el ponte vecchio
R que le quería comprar unos aretes específicos a S entonces entramos a todas las tiendas e igual no los encontramos
la pasta de prosciutto con salsa de espinaca y queso parmesano en el mercado
los cornetos de nutella que nos comimos enfrente del duomo
ver el atardecer desde la piazza michelangelo
encontrarnos allá con N
el sandwich mas rico que me he comido
el mesero que nos coqueteo y nos invitó a prosecco
caminar sola por florencia y saber a donde estaba yendo
hablar sobre libros, política y la universidad con R en el café de al lado de la casa
como me acompañaron a la estación del bus
A que me ayudó en mi crisis cuando (obvio) cogí el tren que no era
la de la recepción del hotel que me ayudó a organizar todo lo de la prueba covid
la mesera del desayunadero que me dejó entrar aunque no tuviera el código QR
lo mismo con los del museo de van gogh
los impermeables amarillos que tenían los que trabajaban en el museo de van gogh
el hotel que tenía tina y agua caliente ilimitada
ver a A
los amigos de A que eran tan confianzudos como yo
el señor de la tienda de souvenirs con el que molesté tanto que después de que hiciera un chiste muy malo me dijo que esa había sido su cuota de comedia por el día
sentarme en la mitad de un parque a leer
el señor que iba cantando con tanta emoción que ni me acuerdo si cantaba bien o mal, solo todo el sentimiento con el que lo hacía
la señora de starbucks que tenía RED (taylors version) y me esperó cuando tuve que salir a sacar efectivo
el señor del puesto de papas que me recomendó su salsa favorita y terminó siendo buenísima
G que salió de donde estaba para abrirme la puerta de la casa en Madrid
el que atendía en subway que me reconoció el acento colombiano y me habló de las telenovelas paisas que se veía por youtube
G invitandome a donde sus amigos de la U
su amiga panameña que me explicaba de quién estaban hablando siempre
L
L que me compró un tiquete de tren y estaba super pendiente para que todo saliera bien
(cuando perdí el tren) el señor que atendía para comprar otro tiquete que se salió de su puesto para acompañarme y mostrarme dónde tenía que buscar y qué tenía que buscar
L que me fue a buscar a la estación del tren
el tour que me hizo de segovia
como intento sacar a todos sus amigos de la U para que me conocieran
el cerdo que cocinó
conectar tán fácil y tan rápido con V
que M haya ido a saludarme
el bartender que nos conversaba y nos ofrecía sus favoritos
el novio que estaba en su despedida de soltero disfrazado de popo
cuando nos pidió un consejo de matrimonio
V y L que se quedaron hablando conmigo
hacer locha con amigas
que me oyeran cuando les conté todo el cuento de taylor swift y que me preguntaran más y estuvieran genuinamente interesadas
el mesero del lugar de poke que nos conversaba y nos contaba de sus problemas
como nos cortó mango extra para los pokes
el amigo de mis papá que me trató como una amiga más, hablándome de su vida, de libros, de mi vida, de política, hasta del emocionario hablamos
lo mucho que sabía y lo mucho que lo quería compartir
EL PRADO !
la colección que tienen del arte de goya
las meninas
el cuadro que vimos que salía en la novela que él se había leído
el thyssen
el arte moderno que también es una cosa loca
ver un kandinsky, un pollock y un picasso
tomarme un café con S aunque casi no alcanzara, que me hubiera hecho tiempo
comer con I, que llegamos a las 6 y salimos a las 12, y hablamos de todo y más, pero de cosas empoderadoras, conversaciones que construyen
ver greece con C
el mesero que me pidió ayuda con un review
la conversación tan increíble que tuve con H
los crepes que nos comimos con C
el uber que casi no llega porque la aplicación solo no le decía donde estaba yo
la señora que se sentó al lado mío en el primer vuelo que me conversaba
Miami
Noviembre 17, 2021
7: 09 pm
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