les voy a contar otro día de Kajuyalí, y se los voy a contar completico, y espero que se lo lean completico, porque es de los días en los que más he aprendido.
allá todos los días tienen un tema y un objetivo, una enseñanza, algo que se puedan llevar, un aprendizaje. en el día de Colombia hubo mucho de eso.
el día lo hicimos de "los colores de la montaña", no tanto de la película, aunque, ¡ qué filme !, sino de mostrarle a los niños sobre los diferentes colores, los distintos lados que tiene el país. pues aunque normalmente el día de Colombia lo enfocamos en mostrarles por que deberían querer al país, mostrarles que "el único peligro es que se quieran quedar", sentimos que ese discurso ya se lo saben, pero que no son tan conscientes de todo el resto.
entonces el staff nos dividimos en tres grupos, representando tres grupos importantes de personas. Unos representaban a los campesinos, otros a grupos indigenas y otros a los grupos armados. para el desayuno, todos teníamos pintada una raya amarilla, el amarillo que en nuestra bandera representa el oro, para nosotros representaba las riquezas, lo bueno. entonces, a un lado del comedor, los campesinos se pararon juntos y hablaron del esfuerzo, de todos aquellos que se levantan todos los días temprano a ordeñar, a cultivar, a trabajar en la economía, a darnos sustento al resto del país;
los grupos armados dijimos la oración patria, hablamos de todos los que tienen la valentía de pelear por su país, que tienen la convicción de pelear por lo que creen, que todos los días se levantan listos para luchar y si les toca, morirían por defender la patria, unos berracos.
los que representaban a los grupos indigenas hablaron sobre su diversidad, sobre la cultura, su importancia, cómo estamos acá por ellos, la cantidad de lenguas tienen, la inmensa cantidad de sabiduría que continuan conservando después de tantos años.
durante las actividades de por la mañana, hablamos sobre los gigantes que tenemos. en bicicletas les contamos sobre Rigoberto y Nairo, en escalada contaron sobre los escaladores profesionales, en arte les hablamos sobre todos aquellos artistas que han puesto el nombre de nuestro país en alto. lo bueno.
después en el almuerzo llegó el rojo. la sangre, lo malo. los campesinos hablaron sobre cómo hay tanta gente que trabaja tierras que no son propias, y no ganan lo justo, de cómo por la exportación hay mucho, demasiado que se gasta, porque no es vendido entonces es desechado. los grupos armados hablamos de el horror que ha sido la guerra. que grupos al margen de la ley, como los propios militares han cometido atrocidades, la cantidad de muertes que se han producido por el conflicto es impensable. que es totalmente polarizador y doloroso pensar en cuantos afectados dejó esa guerra que nos duró mas de 50 años. los grupos indigenas hablaron de que los están matando. que seguimos imponiendo nuestras percepciones como verdades totales, y les estamos matando su cultura, sacándolos de sus espacios, extinguiéndolos.
las actividades de la tarde giraron en torno al rojo, eran rotaciones. en una estación era teléfono roto. ese juego donde le dicen un mensaje a alguien y el se lo tiene que decir en secreto al de al lado, y este al de al lado y así sucesivamente hasta llegar a la última persona, que lo dice duro, y siempre llega un mensaje muy diferente al que se mando. porque así es como funcionan las noticias, los medios. por estar tan polarizados, y por cumplir diferentes agendas, dan mensajes con la mitad de la información, nos quedamos con historias machacadas por los enfoques que les dan a las noticias, les dijimos a los niños.
otra de las actividades fue pedirles que hicieran un totem, que con unos bloques de madera armaran una figura y le pusieran significado, empeño. luego llegaba alguien, ciego, extraño y ajeno a la situación y se los destruía, se los pisoteaba. porque eso es lo que nosotros le hacemos a los grupos indigenas. cogemos aquello que ellos valoran y se los destruimos, y les embutimos nuestras creencias. cogemos todo el conocimiento que han estado construyendo durante años y se los invalidamos, les machacamos su cultura, nosotros, que somos los reales extranjeros.
otra estación comenzaba con preguntas. les preguntábamos si alguno tenía playstation, los que decían que si levantaban la mano, y la mayoría levantaba la mano. les preguntábamos si les gustaba ir de shopping, la mayoría levantaba la mano, si iban al colegio en carro, si en su tiempo libre les gustaba; dormir, ir a cine, hacer algún deporte, si sabían dos o más idiomas, si tenían fincas, si tenían más de una finca, y en todas había puras manos arriba. entonces les preguntamos si alguno había visto una bala y bajaron algunas de esas manos que habían estado arriba, si la habían tocado, y muchas menos arriba, preguntamos si alguno había disparado una pistola, si habían estado en una balacera, si les había pasado que estaban dormidos y se levantaron por el ruido de las balas, y casi nadie levanto la mano en esas. les explicamos que en la mayoría del país era al revés, a lo que ellos levantaban las manos, la mayoría de los niños del país no las habría levantado, y a lo que ellos respondieron que no, la mayoría habría dicho que si. durante estas preguntas íbamos cogiéndolos por grupos y metiéndolos, con una tela tapándoles los ojos, a un cuarto. este cuarto tenía algo así como un laberinto, un camino que ellos tenían que encontrar, en el piso había obstáculos y había ruidos asustadores alrededor. cuando llegaban al otro lado, les contábamos que algo parecido a ese miedo, esa ansiedad y ese desconcierto que sintieron es lo que muchas personas sienten todos los días caminando al trabajo, o hasta al colegio cuando caminan por campos que pueden o no tener minas. que caminan ciegos sin saber si donde pisan es seguro o no. que vivimos en una burbuja de suerte, que somos afortunados y tenemos que ser agradecidos de que esas cosas son cosas que sabemos que pasan porque nos cuentan, no porque nos pasan.
en la última de las estaciones les dábamos 2 gomitas al grupo (que eran de 20 niños mas o menos) para que se las repartieran igualitariamente. y en secreto, cogíamos a tres niños y les dábamos una chocolatina a cada uno y les decíamos que se la podían quedar o la podían compartir. por rotación, de pronto uno la compartía a conciencia. A la mitad del tiempo decíamos que una persona tenía una chocolatina y este decía perdón y la compartía. y al final del tiempo contábamos que hubo una chocolatina más, pero que la persona anónima no se animo a compartirla. porque eso siempre pasa en la sociedad, siempre hay quienes, por diferentes motivos, tienen beneficios, tienen ventajas, pero esas personas pueden usarlas solo para su beneficio propio o para ayudar a los demás. y la invitación es a que usemos todas esas cosas que nos hacen afortunados y aventajados para ayudar a los demás a crecer e impulsarse, no para nosotros solos.
fueron actividades que los chocaron mucho, que les abrieron mucho los ojos.
después, como era también el día del camping, les repartimos las carpas y lo demás. todos los grupos eran mas o menos iguales, pero a unos les dimos una sola carpa y a otros 15, a unos les dimos 3 aislantes y a otros 30 y les dijimos que todos los del grupo tenían que dormir cómodos con lo que les dimos. rápidamente entre los grupos hicieron una mejor distribución, donde todos los grupos tenían suficiente para las personas que eran. entonces les preguntamos que, ¿ por qué no era así todo ? ¿ por qué no era así siempre ? ¿ por qué nosotros que tenemos tanto no nos esforzamos un poco más en dar más, en ser mejores, en dar mas oportunidades y recursos a aquellos que no lo tienen ? ¿ por qué ?, si a nosotros nos sobran y a ellos les faltan.
tras armar las carpas, en un atardecer esplendido, de esos que uno para y se acuerda de lo maravilloso que es el mundo, de lo increíble que es Colombia, de lo espectacular que es el llano;
tuvimos una fogata donde hablamos del azul. el azul es la esperanza, el cambio, el futuro. los grupos armados hablamos de que estamos viendo viendo los frutos del proceso de paz, que cada día son más los que están siendo reintegrados y reincertados en la sociedad, que ya no se está muriendo tanta gente. los campesinos hablaron de que cada día están haciendo más mercados locales, que cada vez están siendo mas reconocidos sus derechos y su trabajo. los grupos indigenas hablaron de que cada día son mas los derechos que se les están reconociendo, que están teniendo más voz en la política, que les estamos un poco más de la importancia que se merecen.
ahí les mostramos a los niños una tabla que hicimos con un croquis del mapa de Colombia. donde tenía puntillas saliendo a través de todo el contorno. y los invitamos a usando uno de los tres colores explicaran como iban a usar lo bueno, lo malo o lo esperanzador para construir un país mejor, y pasaron un hilo de ese color a través del mapa.
un final increíble a un día aún más.
Avión Bogotá - Los Angeles
Agosto 14, 2021
6:13 pm
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