no sé qué hacer con esta página en blanco. siempre siento que tengo mucho que decir pero no es nada concreto. pienso mucho en el acto de escribir más que en el contenido, porque me encanta y me libera y me permite ser y estar presente al no estarlo también. me encanta como mi cabeza salta de idea a idea, estoy en la mitad de una frase y casi que puedo sentir las neuronas conectando para la próxima. siento que no logro describir lo que hay en mi cabeza por el susto de que el próximo pensamiento se escape. eso es lo malo de la escritura en papel. no puede ser editada, no hay como cambiar, reorganizar. cambiar una palabra que le pueda dar más sentido a la frase. me encanta pensar en el papel como un bosquejo. me encanta que se puede quedar como eso. me encanta que para editarlo tiene que ser reescrito. me encanta (como la digna antropóloga que soy) conceptualizar, cuestionar, reflexionar sobre el hecho mismo, sobre la acción, sobre lo que implica para mí la escritura. sea esta solo un acto como cualquier otro (diría cualquiera), pero no lo es. creo que en sí es un acto de rebelión, anti conformista, celebratorio y revolucionario.
me encanta encontrar excusas para escribir. creo, mentira se, que el hecho de pegar las cosas y darle más espacio a lo cotidiano me ha permitido explorar más la escritura, ahondar más en lo que antes no me enfrascaba. ponerle un microscopio a todo y evaluar lo que veo, desde qué lente lo veo, ¿por qué veo desde ese lente? ¿por qué es eso importante ?
me ha parecido maravilloso hacerlo así, el ejercicio de la escritura así.
enero 25, 2024
11:17 pm
cartagena
Comentários